Deportes | Los de Simeone se metieron descaradamente atrás y a los de Guardiola le faltaron ideas para quebrar el cerrojo. Una genialidad de Foden y un gol de De Bruyne desequilibraron el partido
Choque de estilos que persiguen el mismo sueño: la Champions League. Con sus formas antagónicas,en el partido de ida de los cuartos de final para sus equipos, Manchester City y Atlético Madrid. Más allá de la rivalidad ideológica, instalada más que nada por el periodismo que por ellos mismos, lo importante era sacar un buen resultado en la ida.
El equipo español no se sonrojó en meterse atrás desde el minuto ceroAnte un rival disciplinado, los de Guardiola no encontraban sitios para penetrar, lo que arrojó como consecuencia unLa responsabilidad era del Manchester City.r, pero el conjunto inglés no sabía qué hacer. Sin embargo, con algo más de velocidad y que actitud tuvo en el tiempo complementario y la oportunidad aparecería.