En su aniversario luctuoso, UNAMrecuerdaA el pintor y grabador holandés Rembrandt 🎨, considerado uno de los grandes maestros de la pintura barroca. ¿Era un artista que desconfiaba de la vista 😯? Lee el artículo de FacMedicinaUNAM PositivamenteUNAM
; fue hijo de un adinerado molinero y desde muy pequeño demostró tener la vocación de ser pintor, aprendió latín, que era el idioma del conocimiento, y en la palabra escrita encontró la fuente del conocimiento, así, con su imaginación reflejó temas históricos altamente narrativos.
“Observamos un autorretrato en un estudio muy sobrio, nos llama la atención la figura pequeña, poco enaltecida y a la que rara vez se le ven los ojos, rompiendo la tradición de la pintura nórdica de las vanitas, que se dedican al control preciso del pincel; pero en su caso, con su escasa paleta cromática y una línea que se difumina, nos revela otros intereses distintos a la pintura...
señaló la maestra Nuria Galland, coordinadora de Servicios Pedagógicos y Contenidos Académicos del Palacio de la Escuela de Medicina. En la vida diaria, señaló, Rembrandt reflejó su gusto por los libros, ya que era un ávido comprador y coleccionista de ellos y de un sinfín de objetos, y destacó que esto era parte de la vitalidad que existía en el norte de Europa, donde se vivía el mercantilismo, la idea de la colección y del apego hacia la parte material de la vida, que les daba a las personas cierta estabilidad ante tanta ambivalencia.
“Otro aspecto importante en la obra de Rembrandt es la revolución y la renuncia a la tradición pictórica del norte de la Europa protestante, donde tenían restringidas las obras de temáticas religiosas, de ahí que la vida diaria, los bodegones, las vanitas y los paisajes hayan sido los temas más representados; sin embargo, Rembrandt siempre tuvo un gran interés por la cultura narrativa, el antiguo testamento y la comunidad judía, y así vemos en...